TELEFONO ROJO/José Ureña

TELEFONO ROJO/José Ureña

• Empeño gubernamental para fortalecer a Cordero
• PVEM: cambio sin perder la propiedad del partido

Alonso Lujambio no ha salido un lector experto en política.

De poco le han servido sus cargos de ciudadano independiente, en cuya calidad fue designado consejero del IFE y del IFAI.

No se ha dado cuenta, por ejemplo, de su desplazamiento como opción B de Felipe Calderón y de toda la estructura panista controlada por y desde Los Pinos.

Ya hay otra en su lugar, pero de ella hablaremos luego.

De momento mencionemos lo dicho ayer por el secretario de Educación Pública.

Dijo a reporteros de su sector:

-Todo mundo tiene su derecho a ser optimista, yo también lo soy.

Para no dejar dudas, agregó, trabaja con “mis amigas panistas, mis amigos panistas y seguiré en ese esfuerzo hasta que hagamos una evaluación completa de cuál ha sido el resultado del mismo”.

Pero como dice una cosa, también otra:

– En las próximas semanas haré una evaluación y tomaré mi decisión y se las comunicaré.

¿O sea?

VAZQUEZ MOTA POR MERITOS PROPIOS

Si Alonso Lujambio titubea a pesar de su optimismo, en la intimidad del poder prefieren hacer una lectura objetiva.

Ahí ven con preocupación el estancamiento mostrado por los dos candidatos oficiales y por ello se han dado dos pasos fundamentales:

1.- Fortalecer a Ernesto Cordero con apoyos de todo tipo y organización de eventos masivos en todos los lugares, y es mejor si se hace con el patrocinio de gobernadores, como ya cumplieron y muy bien Juan Manuel Oliva y Rafael Moreno Valle.

Con una acotación de Cordero: están “confundidos” quienes lo ven como candidato oficial de Los Pinos.

2.- Desbrozar el camino para evitar confusiones y polarizaciones, para lo cual más adelante serán bajados Alonso Lujambio y Emilio González.

3.- Y si a pesar de ello Cordero no crece y el rebelde Santiago Creel pone en riesgo el triunfo del delfín calderonista, entonces los apoyos irán para Josefina Vázquez Mota, todavía diputada en funciones.

La búsqueda de mayor popularidad, sobre todo entre los casi 1.9 millones de militantes y adherentes panistas, quienes serán convocados a votar el candidato azul, pasa por mantener a Cordero en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Es y será su plataforma de lanzamiento aunque la oposición no quiera negociar con él paquete económico para el año próximo porque en él dominan sus aspiraciones presidenciales sobre sus funciones hacendarias.

Conste: Cordero ha sido, es y será el plan A de quien quiere dejar en Los Pinos y Palacio Nacional porque lo considera un hombre auténtico, honesto y leal a toda costa.

Subraye usted la última virtud: leal a toda costa a Felipe Calderón.

LA DESGONZALIZACION DE UN PARTIDO

Jorge González Torres pretende desgonzalizar un poquito al Partido Verde Ecologista de México.

Valga el énfasis: un poquito.

Desde el siglo pasado, cuando convocaba a la ciudadanía al grito de No votes por un político, vota por un ecologista, el señor ha sido el único dueño del Partido Verde.

Lo ha presidido él y lo preside su hijo Jorge Emilio González, quien en la vida pública es más identificado como El Niño Verde, pero a partir de septiembre ya no habrá un González al frente.

Habrá, eso sí, una especie de dirección colegiada con gonzalistas sin González.

El candidato más fuerte es el senador Arturo Escobar y Vega.

A él se agregará otro cuadro afín a Jorge González Torres.

No es posible adelantar el nombre porque se le han enredado las negociaciones internas y el dueño del partido todavía tiene tiempo para buscarle una especie de plusvalía.

Así será más atractivo para quien quiera su amor.

Dicho de otra manera: el PRI debe ir preparando huecos en el Senado, en la Cámara y en los estados a fin de dar espacio a presuntos ecologista.

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